martes, 11 de septiembre de 2018

Rescate en lo hondo seco

Eran los años en que el boulevard Juan Pablo II estaba en construcción 🏗 en San Pedro Sula. Los retrasos en el proyecto fueron muchos. Tristemente decirlo, en nuestra Honduras 🇭🇳 la vida vale casi nada. Apenas había señalización de potenciales peligros en las zonas construidas.
Había sido un domingo de lluvia torrencial toda la mañana y parte de la tarde.
Las calles estaban llenas de agua 💧 y el tráfico totalmente lento 🐢 casi a vuelta de rueda.

Llegando al monumento a La Madre, a mano derecha ➡ estaba una gasolinera ⛽ Dipsa, (ahora transformada en una Puma.).
En la entrada de la gasolinera un carro turismo marca Subaru, color rojo, tenia parte de su  trompa dentro de un  hoyo 🕳, pero como estaba lleno de agua parecía no era asunto de mucho cuidado. Pero no  era más que una trampa mortal.
Al ver el carro a punto de caer dentro de la mortal trampa, mi papá me ordenó que bajara, aún debajo de la lluvia ☔ a ayudar a estas personas.
Mis padres siempre nos criaron con un fuerte 💪 sentido de ayudar aún cuando nadie más lo hace.

Sin dudar salí como un rayo 🌩 del vehículo, con la energía y habilidad de alguien de dieciocho años, sin pensar en mi seguridad ni por un instante.

Al acercarme al vehículo, observé que había una pareja de ancianos dentro. Me asusté mucho al ver que podrían caer con el vehículo al fondo de ese hoyo.
Desde las bombas de gasolina ⛽ vi que los bomberos me hacían señales con las manos, también gritaban, pero la lluvia no dejaba escuchar lo que decían.
Pensé, que porque no ayudaban a esta gente en peligro.

Me acerqué por la izquierda del Subaru para ayudar al conductor a salir y ponerlo a salvo, luego a la que asumí era su esposa.

Al querer abrir 🔓 la puerta del vehículo, solo senti que el piso se volvía liquido y me hundi en el agua. Todo se puso negro y tibio. ¡El hoyo era más ancho y profundo de lo que aparentaba!
No entré en pánico.
Recordé como mi papá me había enseñado a nadar 🏊 y salir de agua profunda, luego de un clavado.
Esperé tocar fondo...me pareció una eternidad llegar al fondo... Me impulsé con todas mis fuerzas hacia arriba 🔝...
Salí a la superficie.. Vi alrededor y busqué el Subaru... Pensé en los ancianos, no en mi.
Di tres perfectas brazadas
...las cuales mi papá me había enseñado como...
Abrí la puerta del conductor... Ayudé al conductor a salir y lo puse a salvo. Luego a su esposa.
Me agradecieron ellos haber ayudado y posiblemente salvar sus vidas.

A mis dieciocho años fue de lo más fácil hacer esas destrezas físicas.

Les dije que había sido un privilegio ayudar.

Me dirigí al carro de mis papás... Me preguntaron si estaba bien.
Y nos fuimos... Jamas se comentó la historia de nuevo...

Al día siguiente les comenté a mis compañeros de cole la hazaña. Por supuesto no me creyeron.
Hasta me retaron que les mostrara donde había sido mi imaginaria hazaña.

¡Los llevé al lugar del profundo hoyo para mostrarles con gestos, la hazaña y sentirme orgulloso por la labor realizada!
Llegamos a la gasolinera ⛽ y comienzo a buscar el lugar....¡Estaba tapado por la arena! Por supuesto, no me creyeron que todo había pasado ahí.
Fui objeto de vacilones todo el año.

Pero nunca olvidaré el rescate en lo hondo seco.

Esa fue una historia real Guicho.
Hay nos vemos Guicho.

Sept 11/2018

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