Cuando caminar hacia mi te vi...supe que serías para mí.
El brillo de tus bellos ojos de mi corazón corrió el cerrojo
para solo tú entrar.
Tu caminar...ten misericordia de mi mujer...esas caderas que
bailan como esas palmas de las Playas de La Ceiba.
Tu olor...Como la fragancia más exótica y exquisita; única que llena todos mis sentidos, avivándolos
despertándoles de su letargo.
Tu voz cual la más hermosa sinfonía combinada con el sonido
suave de la calma de un verde y quieto campo cubierto por un hermoso cielo
azul. Tu voz suave y viva como el murmullo de un riachuelo que de día y noche
canta sin cesar para nuestras almas llenar y confortar.
Tus finos y delicados labios cual lejano y prohibido manjar
hasta ese momento...dejó de ser lejano y se volvió cercano y permitido.
¿Cómo es posible en un solo ser tanta belleza yacer?
Veo en ti una perfección única de belleza, amor y ternura.
Eres de esas personas que convencen de que hay un Poder Superior Creador que
con sus delicados pinceles ha pintado en ti...de lo mejor de su colección.
Fijar tus bellos ojos en mi...cual inmerecido don...Me hace pensar cuán afortunado soy...de que tantos e incontables caminos de este universo...mi camino haya tropezado con el tuyo en un maravilloso accidente que espero que para siempre sea un solo camino hacia un futuro hermoso y brillante...Contigo al frente cual la joya más preciosa de todas las joyas que forman esto que llamamos mundo.
Quiero que seas mi mundo, vivir en ti, respirar de ti, beber de ti, crecer en ti y finalmente ver que mis ojos se cierran contemplando tus ojos de bellos colores y tu sonrisa. Así partir de este mundo un dolor no será, sino un bello y plácido dormir para en ti por siempre vivir.
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